El Doctor sigue sin resolver el misterioso embarazo de Amy, mientras la TARDIS es capturada en las primeras oleadas de un "tsunami solar" y obligada a materializarse en la Tierra en el siglo 22. El Doctor, Amy, y Rory se encuentran en una isla remota en el futuro, en una fábrica ubicada en un monasterio de bombea un ácido valioso, altamente corrosivo. La tripulación mínima de la fábrica utiliza un líquido de auto-replicante, que a partir de eso crean replicas exactas de sí mismos, coloquialmente llamados "gangers". La tripulación control estos gangers en camas especiales de control, que operan la fábrica en los órganos disponibles en el ambiente peligroso. El Doctor teme que la peor parte del tsunami solar golpee a la fábrica en breve, amenazando a aquellos que aún permanecen y el Doctor se ofrece a llevar a la tripulación en su TARDIS. La capataz, Miranda Cleaves , se niega a cerrar la fábrica hasta que reciba órdenes desde los superiores. A medida que la tormenta solar comienza, El Doctor corre para desconectar el connector solar, pero un ataque solar llega al castillo, lanzando al Doctor de la torre y a todos los demás inconscientes.
Cuando se despiertan después de lo que ellos creen que ha sido unos minutos, se encuentran fuera de las camas de control, y con ningún signo de los gangers. Sin embargo, sus propias pertenencias personales han sido usadas y movidas, mientras que la TARDIS se ha hundido en el suelo ácido corrosivo. El Doctor explica que probablemente han estado inconscientes una hora, los gangers probablemente se creen que son el equipo real. Pronto descubren que Miranda y Jennifer sean gangers haciéndose pasar por el equipo real, mientras que Jennifer lucha con su identidad, la capataz Miranda trabaja en secreto con los gangers para tratar de matar a los seres humanos reales. El Doctor, Amy, y Rory se separan y el Doctor trabaja con el equipo para identificar y evitar a los gangers y detener el daño de la fábrica. Los seres humanos y los gangers se ven cara a cara, y el ser humano Miranda golpea a uno de los gangers con una carga eléctrica de alta potencia, causándole la muerte. A medida que los gangers se reagrupan y planean un nuevo ataque, el Doctor se cabrea con Miranda acusa de matar a un ser vivo, pero Miranda se niega a reconocer esto. El Doctor determina que el lugar más seguro en la isla se encuentra en la capilla, y dirige todos hacia alli. Los gangers con los trajes de protección se dirigen hacia la capilla, Rory no entra para tratar de encontrar a Jennifer, y se separa del grupo. La tripulación recupera sus sentidos, mientras surge un Doctor-ganger diciendole al grupo "confía en mí, soy el Doctor".
Cuando se despiertan después de lo que ellos creen que ha sido unos minutos, se encuentran fuera de las camas de control, y con ningún signo de los gangers. Sin embargo, sus propias pertenencias personales han sido usadas y movidas, mientras que la TARDIS se ha hundido en el suelo ácido corrosivo. El Doctor explica que probablemente han estado inconscientes una hora, los gangers probablemente se creen que son el equipo real. Pronto descubren que Miranda y Jennifer sean gangers haciéndose pasar por el equipo real, mientras que Jennifer lucha con su identidad, la capataz Miranda trabaja en secreto con los gangers para tratar de matar a los seres humanos reales. El Doctor, Amy, y Rory se separan y el Doctor trabaja con el equipo para identificar y evitar a los gangers y detener el daño de la fábrica. Los seres humanos y los gangers se ven cara a cara, y el ser humano Miranda golpea a uno de los gangers con una carga eléctrica de alta potencia, causándole la muerte. A medida que los gangers se reagrupan y planean un nuevo ataque, el Doctor se cabrea con Miranda acusa de matar a un ser vivo, pero Miranda se niega a reconocer esto. El Doctor determina que el lugar más seguro en la isla se encuentra en la capilla, y dirige todos hacia alli. Los gangers con los trajes de protección se dirigen hacia la capilla, Rory no entra para tratar de encontrar a Jennifer, y se separa del grupo. La tripulación recupera sus sentidos, mientras surge un Doctor-ganger diciendole al grupo "confía en mí, soy el Doctor".
No hay comentarios:
Publicar un comentario